La
primera. No, no hablo del Real Madrid – Barcelona, hablo del Atlético –
Barcelona, hablo de balonmano. Fundamental especificar esto en una semana como
esta donde el mundo parece olvidar todo aquello que suceda a más de 50 metros
del Bernabeu. Nuestro clásico debe tener vida y luz propia.
Es
fundamental mover en los medios y las redes sociales este partido. Es un fin de
semana complicado, pero es el primer Atleti -
Barça desde hace 17 años en liga. Y eso no puede pasar desapercibido.
Los encargados de comunicación de ambas partes tienen un reto y sé que lo van a
conseguir. El resto, los que podemos aportar en las redes sociales, tenemos que
dejarnos oir y dar bola al partido que más puede hacer mover nuestro deporte en
España y Europa. Hay que demostrar que #elbalonmanosemueve.
Recuperar
el ambiente de la Supercopa
será muy importante. Enseñar un pabellón lleno el día que más ojos vamos a
tener fijados en nuestro deporte es algo trascendental. Obviamente, para el
Atlético es importante, pero creo que lo es más para el balonmano español. Una
parte de la imagen de ese evento pasa por las gradas de Vistalegre.
En lo
puramente deportivo, para mí, el Barcelona es favorito. Mirando desde la
frialdad, desde la amplitud de plantilla, desde lo demostrado en las primeras
jornadas de liga. Y a partir de aquí, también es cierto que es el partido en el
que nunca apostaría. El pelín de superioridad que puede tener el Barça se ve
compensado claramente por lo que significa el partido y por el factor local de
los rojiblancos. Sirva como ejemplo la Supercopa de España, donde hubo una diferencia en
el marcador que no responde a la realidad de ambos equipos.
El
Barcelona me ha ido gustando desde el principio, en liga y Champions, pero el
Atlético va creciendo. Me gustó especialmente en el partido de Rusia de Liga de
Campeones. No fue brillante, pero tuvo mucho carácter y minutos defensivos de
mucha calidad. Por ello, se presenta como un rival muy temible para los
catalanes.
El
lunes, en De Rosca, Cecilio Alonso apuntaba la importancia de los porteros.
Estoy de acuerdo. Tendremos a cuatro de los diez mejores del mundo sobre la
pista y de ellos dependerá buena parte del resultado. Una tarde inspirada de
Saric, Sterbik, Sjostrand u Hombrados es suficiente para amargar a cualquier
equipo. Todos los conocemos.
En
suma, partidazo de balonmano y oportunidad para el balonmano. ¡No la dejemos
escapar!
Choque con pasado, de presente y para el futuro. Como bien dices, el balonmano tiene una oportunidad que no puede desaprovechar. Los equipos deben echar el resto, pero los grandes medios (diarios deportivos, televisiones y, cómo no, ¡radios!) deben también poner de su parte. Ya les dirás a tus "jefes", ¿no? Abrazo y a disfrutarlo!
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